Procedimiento
Cortá los limones por la mitad y exprimí todo el jugo. Reservá las cáscaras.
Colocá las cáscaras exprimidas en una licuadora junto con el agua. Procesá hasta lograr una mezcla espesa y uniforme.
Con ayuda de un colador, filtrá la preparación para separar los restos sólidos.
En el líquido obtenido, agregá el bicarbonato de sodio, la sal, el alcohol y el jabón para platos. Mezclá bien hasta que todos los ingredientes se integren por completo.
Usando un embudo si es necesario, volcá la mezcla en una botella de plástico con boquilla para facilitar su aplicación.
Modo de uso
Aplicá una pequeña cantidad del producto en los bordes internos del inodoro, dejando que escurra hacia abajo.
Dejá actuar por al menos 5 minutos para que los ingredientes hagan efecto.
Luego, podés frotar suavemente con un cepillo o simplemente tirar la cadena.
Este preparado actúa desinfectando, eliminando el sarro y dejando una fragancia cítrica muy agradable.
Además, gracias a los componentes naturales y al poder del limón, mantiene el inodoro limpio durante varios días, reduciendo la necesidad de limpiezas frecuentes.
Podés repetir la aplicación una vez por semana para mantener los efectos durante todo el mes.
Este truco es ideal para quienes buscan una alternativa económica, ecológica y eficaz para el cuidado del baño.
Una manera simple de tener el inodoro siempre impecable, sin esfuerzo y sin productos químicos agresivos. ¡Probalo y olvidate del sarro y los malos olores!
