Preparación
Lavá bien el zapallo y cortale la parte superior a modo de tapa. Retirá todas las semillas y filamentos del interior. Envolvelo en papel aluminio y colocalo en una fuente para horno con aproximadamente 2 centímetros de agua en la base.
Llevá el zapallo al horno precalentado a 180°C y cocinalo durante 1 hora, o hasta que la pulpa esté tierna pero sin deshacerse. Esto permitirá que sirva como contenedor para la carbonada.
Mientras el zapallo se cocina, prepará el relleno. En una cacerola grande, calentá las dos cucharadas de aceite y dorá la carne de bola de lomo y la ternera cortadas en cubos medianos.
Agregá la cebolla y el morrón picados en trozos pequeños. Rehogá hasta que estén bien tiernos. Incorporá los tomates pelados y picados junto con su jugo natural.
Sumá las zanahorias cortadas en rodajas finas y las papas peladas y cortadas en cubos. Condimentá con orégano, laurel, ají molido, sal y pimienta a gusto.
Añadí el puré de tomate y mezclá bien. Cociná a fuego medio durante unos 15 minutos para que los sabores se integren.
Incorporá los cubos de caldo disueltos en el medio litro de agua caliente, asegurándote de que los ingredientes queden cubiertos por el líquido. Bajá el fuego y cociná todo durante 50 minutos, revolviendo de vez en cuando.
Sumá las rodajas de choclo y dejá que la preparación siga a fuego mínimo por otros 30 minutos, hasta que las papas estén completamente tiernas y el guiso tenga una consistencia espesa.
Una vez listo el relleno y el zapallo cocido, retiralo del horno y descartá el papel aluminio. Rellenalo con la carbonada bien caliente.
Si querés darle un toque final de frescura y color, espolvoreá con perejil picado antes de servir.
Consejos:
Si preferís, podés cortar parte de la pulpa del zapallo en cubos y agregarla directamente a la carbonada durante la cocción.
Para una versión más sabrosa, podés reemplazar parte del agua por caldo casero de verduras o de carne.
Si te gusta un toque más picante, sumale un poco más de ají molido o unas gotas de salsa picante.
Esta receta es ideal para reuniones familiares o fechas especiales, ya que rinde varias porciones y permite servir directamente en la mesa de una forma vistosa.
Con esta receta tradicional, vas a lograr una carbonada en zapallo bien completa, abundante y perfecta para disfrutar en los días de frío.